Evangelio Semanal


En El Hogar Está la Familia

La idea, el sueño y la realidad de lo que es familia es tan fuerte y perdurable que lo usamos para describir lo mejor de las relaciones humanas. Hablamos de una familia de naciones, de nuestra familia eclesial y parroquial. El mejor halago que podemos dar a un amigo o amable anfitrión es decirle que nos sentimos como en casa con su compañía, que nos sentimos parte de la familia.

Las familias son el primer crisol en el que se prueba y se fortalece el amor. Jesús mismo fue una de tres personas que vivía a la sombra del otro. Esta familia, como la nuestra, no siempre “lo hacía todo bien”, pero siempre trataba. Estos tres amateurs celebraban un día de fiesta, y uno de ellos se perdió. Los otros dos se preocuparon bastante y se esforzaron grandemente para encontrar al tercero, un niño después de todo, que siempre buscaba el significado de su llamado. Encontró su vocación –hacer la obra del Padre– pero también volvió a casa con sus padres.